Este deseo de poder y control nace del punto de querer controlar y dirigir mi realidad como algo separado de mi mismo, a través de un poder y control separado de mi mismo en vez de tomar responsabilidad por cada palabra hablada, por cada acción, por cada pensamiento, emoción y sentimiento, y de esa forma dirigirme y controlarme a mi mismo así como mi realidad.
Por lo que me doy cuenta de que el punto principal de poder y control es definir esos conceptos como algo externo y separado de mi mismo, y de esa forma no dándome cuenta de que el poder y control real existen en y como yo mismo como una expresión de mi mismo por la cual tomo responsabilidad de todo lo que he llegado a ser y de ese modo me dirijo y controlo a mi mismo hacia el punto de sentido común, viviendo de esa forma por lo que es mejor para todos por igual.
Me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado definir el poder como algo separado de mi mismo y de esa forma creer que para obtener poder he de trabajar y conseguir dinero, he de ir al gimnasio y tonificar mi cuerpo para sentirme fuerte y poderoso, y me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado creer que al sentirme poderoso por tener dinero y tener un cuerpo musculoso y de esa forma creer ser superior a las personas que tengan menos dinero que yo y un cuerpo menos tonificado que el mío.
Me perdono a mi mismo que no me he permitido y aceptado darme cuenta de que el hecho de tener mucho dinero y un cuerpo físico tonificado y musculoso nunca podrá hacerme superior a otro ser humano, sólo es una creencia creado en mi mente basada en interés propio para creer que realmente puedo llegar a ser superior a otra persona y de esa forma me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado creer que definiéndome como superior a otras personas puedo controlar a las personas que he definido como inferiores a mi.
En el momento y cuando me veo deseando tener más dinero y tener mi cuerpo más tonificado para sentirme poderoso - me detengo y respiro, me doy cuenta de que ese hecho sólo alimenta a mi interés propio como mi personaje 'poderoso'. Me comprometo a mi mismo a desarrollar mi poder como una expresión de mi mismo, como una forma de tomar responsabilidad y dirigirme a mi mismo en cada momento.
Me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado definir al poder como una forma de controlar y dirigir a las personas que me rodean para satisfacer mi interés propio, por lo que me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado querer dirigir y controlar a las personas.
Me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado tener miedo de perder el poder que tengo como el dinero que tengo y como la fuerza en y como mi cuerpo físico humano. Me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado conectar el hecho de perder el poder que tengo como el dinero que tengo y como la fuerza física en y como mi cuerpo - con el miedo en si. Me perdono a mi mismo que me he permitido y aceptado temer mi propio miedo.
En el momento y cuando me veo temiendo perder el poder que tengo como el dinero que tengo y como la fuerza en y como mi cuerpo físico - me detengo y respiro, me doy cuenta de que temer ese hecho no evitará que pierda el 'poder' como el dinero que tengo y como la fuerza en y como mi cuerpo físico, y me doy cuenta de que participar en mi mente en y como ese miedo provocará que esté alimentando la existencia de ese miedo en y como yo. Me comprometo a mi mismo a establecerme como la responsabilidad de mi mismo y de esa forma no permitir ni aceptar participar en y como el miedo a perder el poder que tengo como dinero y fuerza en y como mi cuerpo físico.
Continuaré en el siguiente blog.
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