martes, 28 de febrero de 2017

Día 326 - Sin tiempo

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado tener la percepción de que no tengo tiempo, de que me falta tiempo para realizar los trabajos que he de hacer para la Universidad.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que soy incapaz de ponerme un horario para trabajar en los proyectos que he de organizar y hacer por mi cuenta, sin que ninguna persona supervise el trabajo que estoy haciendo.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que necesito ir a la Universidad, siguiendo un horario establecido por alguien externo y separado de mí mismo, para así ser capaz de ponerme a trabajar y hacer lo que me he comprometido a hacer.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado establecer mi organización y disciplina en seguir los horarios establecidos por la Universidad, desplazándome al lugar donde la Universidad me ha asignado ir.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que no soy capaz de establecerme como el principio director de mi vida y así ser capaz de mantener la estructura/equilibrio de mi vida a través de la responsabilidad y disciplina de moverme momento a momento a llevar a cabo todas y cada una de las decisiones y compromisos que he decidido/establecido hacer en mi día.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado definir el principio director de mi vida en algo externo y separado de mí mismo, como es la Universidad, como las asignaturas que he de cumplir de la forma que se me pide que lo haga.

Me perdono a mí mismo que no me he permitido y aceptado darme la oportunidad de confiar en mí mismo para así crear/elaborar un horario y seguir día a día, no porque algo externo y separado de mí mismo me diga lo que tengo que hacer sino más bien siendo una expresión de mí mismo para mí mismo en la cual me muestro a mí mismo que puedo confiar en mí mismo y ser responsable al llevar a cabo todas y cada una de la tareas que me he comprometido realizar.

En el momento y cuando me vea a mí mismo creyendo que no tengo tiempo para cumplir las tareas que me he comprometido a hacer, por no haber establecido ni seguido un horario durante mi día que me permita cumplir todas las cosas que me he comprometido a hacer - me detengo y respiro. Me doy cuenta de que lamentarme de no tener tiempo para cumplir todas las tareas que me he comprometido a hacer no hará ninguna diferencia, ya que me doy cuenta de que el no tener tiempo para realizar todas las tareas es la consecuencia manifestada de haber postergado el realizar aquellas tareas que podría haber hecho en momentos anteriores, por lo que la forma práctica de seguir adelante y cumplir las tareas que sea capaz de hacer en el tiempo del que dispongo es simplemente dirigirme a mí mismo a hacer aquello que pueda en el momento en el que me encuentro.

Me comprometo a mí mismo a diseñar y seguir un horario/agenda donde de forma dinámica cada semana prepare lo que he de hacer la semana siguiente, usando para ello la información de la que dispongo sobre las tareas que he de realizar y el momento en el que debería tenerlas acabadas.

lunes, 27 de febrero de 2017

Día 325 - Cambio instantáneo


Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que no estoy avanzando nada en mi proceso, que estoy estancado.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado querer/desear ver cambios  en mí mismo inmediatamente después de aplicar las declaraciones de perdón, corrección y compromiso a mí mismo, como si el cambio sucediera por arte de magia solo con usar ciertas palabras.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que no tengo tiempo de perdonarme a mí mismo, y así querer desarrollar un método de cambiarme a mí mismo de forma rápida y sin tener que hacer nada.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado querer/desear finalizar el proceso, llegar a un punto/momento en el que diga: 'ya está he terminado no tengo que hacerlo más'.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado haber definido el perdonarme a mí mismo como una carga, algo muy complicado y agotador, como un deber, algo que he de hacer por un motivo externo y separado de mí mismo, el cual es mostrar al resto de personas el cambio que es posible llegar a hacer.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado querer caminar este proceso para que el mundo/realidad que me rodea, reconozca y alabe el trabajo y dedicación que estoy haciendo para cambiarme a mí mismo.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que necesito la aprobación y la aceptación del resto del mundo para expresarme de la forma en la que lo hago actualmente.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado depender y definir mi expresión, en base a lo que las personas que me rodean piensen y crean sobre mí mismo como mi forma de ser y expresarme.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado definir la seguridad y confianza de mí mismo en lo que las personas que me rodean crean, piensen y opinen de mí.

En el momento y cuando me vea a mí mismo creyendo que son tan solo escribir mis declaraciones de perdón, corrección y compromiso a mí mismo voy a cambiar de forma instantánea - me detengo y respiro. Me doy cuenta de que lo que escribo es la base, un apoyo que me ayuda a la hora de enfrentar las situaciones sobre las que escribo en esta realidad física, ya que me doy cuenta de que lo que realmente importa es si soy capaz de pararme y de no dejarme llevar por mis emociones, pensamientos y sentimientos en la situación que enfrento.

Me comprometo a mí mismo a vivir en y como yo en cada momento que me experimento en esta realidad física, todas y cada una de las palabras que en honestidad conmigo mismo escribo para ayudarme a ser la mejor versión de mí mismo.

sábado, 25 de febrero de 2017

Día 324 - Carnaval



Estando en mi pueblo y al ver la pasión que tiene mi padre, mi hermana y hermano por el carnaval, y al ver en la televisión del pueblo el desfile he sentido nostalgia de los momentos, en los cuales solía ver el desfile y disfrazarme con mis amigos. Al recordar aquellos momentos he sentido el deseo de quedar con mis amigos y dar una vuelta por el pueblo como en los viejos tiempos. Al darme cuenta de que no era posible, de que no era tan fácil conseguir juntarnos todos, he sentido pena al no poder hacer aquello que deseaba. Así que en este blog camino esta experiencia del carnaval de mi pueblo.

Declaraciones de perdón, corrección y compromiso a mí mismo:

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado querer/desear salir con mis amigos para ver el desfile de carnaval, sin haber tenido en cuenta si al resto del grupo le apetecía y podía quedar para dar una vuelta por el pueblo.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que para salir y ver el desfile de carnaval en mi pueblo he de estar con mis amigos o con alguna persona, viendo así imposible/inviable el salir solo si a ninguna otra persona que conozca le apetezca hacerlo.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado creer que es algo triste el salir e ir solo a ver el desfile de carnaval.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado conectar el hecho de ir solo a ver el desfile de carnaval con el hecho de ser creer que es algo triste.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado tener miedo de ser juzgado como un marginado sin amigos por ir solo a ver el desfile de carnaval. Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado conectar el hecho de tener miedo con el hecho de ser juzgado como un marginado sin amigos. Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado temer a mi propio miedo.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado conectar el hecho de ir solo a ver el desfile de carnaval con el hecho de ser juzgado, por las personas que me vean, como un marginado sin amigos. Por lo que me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado juzgarme a mí mismo como un marginado sin amigos en la situación la cual estoy en un evento/situación pública solo.

Me perdono a mí mismo que me he permitido y aceptado sentir tristeza en la situación la cual me apetece salir con mis amigos a ver el desfile pero no puedo hacerlo porque a mis amigos no les apetece o que pueden hacerlo.

En el momento y cuando me vea a mí mismo queriendo/deseando ir a ver el desfile de carnaval solo si voy con mis amigos o con algún otro acompañante - me detengo y respiro. Me doy cuenta de que puede que mis amigos o cualquier otro acompañante no pueda o no le apetezca ir conmigo a ver el desfile, por tanto me doy cuenta de que si quiero ver el desfile de carnaval y ninguna otra persona puede, puedo ir yo solo.

Me comprometo a mí mismo a ir a ver el desfile de carnaval si así me apetece tanto si voy acompañado como si no.